Spanish Million Peso Bill Gospel Tract

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Libertad vale la pena morir por ella. ËEstàs libre o eres un esclavo? La respuesta puede sorprenderte. Jesucristo dijo, ñTodo el que peca es un esclavo del pecadoî (Juan 8:34). ËEres un esclavo al pecado? Toma una prueba para ver. ËAlguna vez has mentido? ËAlguna vez has robado algo (el valor es irrelevante)? ËAlguna vez has odiado, maldecido o hablado mal de alguien? Dios ve a éstos como el asesino (Mateo 5:21-22, 1 Juan 3:15). ËAlguna vez usaste el nombre de Dios en vano? Éso se llama blasfemia. ËAlguna vez has codiciado? Dios ve la lujuria como el adulterio (Mateo 5:27). Si has hecho estas cosas, Dios te ve como un mentiroso, asesino, ladrÑn, blasfemo y adultero.  ËDios te juzgarÕa inocente o culpable? ËQué te mereces, el cielo o el infierno?  Si eres honesto, sabes que tu justo castigo serÕa el infierno.  Jesucristo describe el infierno como un lugar de castigo eterno, de llanto y rechinar de dientes, donde el fuego nunca se apagarà (Mateo 3:12, 24:51, 25:30-46), pero no es el deseo de Dios para que vayas a ese lugar. Hay una forma de escapar, hay un camino para la libertad. ñPero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavÕa éramos pecadores, Cristo muriÑ por nosotrosî (Rom. 5:8). Dios derramÑ el castigo sobre su hijo en la cruz, que voluntariamente soportÑ el castigo de nuestros pecados en nuestro lugar (Rom. 3:24-26). Luego resucitÑ de entre los muertos; éso demostrÑ la aceptaciÑn de Dios Padre del sacrificio (Rom. 4:25). La libertad es gratis, pero no fue barata- Le costÑ a Dios la sangre de su propio Hijo por nuestra rebeliÑn. ËQuieres ser libre de la pena eterna y la esclavitud del pecado? JesÏs promete, ñAsÕ que si el Hijo los libera, seràn ustedes verdaderamente libresî (Juan 8:36). ËCÑmo recibes esta libertad? Es un regalo (Efes. 2:8-9). Nunca se puede ganar. Dios dice que ñson esclavos de aquel a quien obedecenî (Rom. 6:16).  ËEstàs dispuesto a dejar de llevar tu vida propia de pecado, aparte de Dios, de todo pecado y convertirte en un esclavo de Dios (Rom. 6:22)?  La promesa de Dios es que JesÏs ñsalvarà a su pueblo de sus pecadosî (Mateo 1:21). Dios manda que te arrepientas de tus pecados, que pongas toda tu confianza en Jesucristo como tu Salvador y que entregues tu vida a él como SeÐor (Maestro). Dios advierte, ñCÑmo escaparemos nosotros si descuidamos una salvaciÑn tan grandeî (Heb. 2:3). çPorque cuando crees tÏ en el evangelio, te conviertes en un ciudadano del cielo! ñPorque nuestra ciudadanÕa està en los cielos, de donde también esperamos ardientemente al Salvador, el SeÐor Jesucristoî (Fil. 3:20). çTu futuro estarà seguro con Él!